Decisiones

     Todos los días, a lo largo del año, tomamos decisiones casi sin darnos cuenta. Al despertarnos en lo primero que reparamos es en la ropa que vamos a llevar ese día al trabajo, o al súper, o al médico. Ni siquiera pensamos que es una decisión importante puesto que instintivamente tomamos la ropa del armario y nos la ponemos. Un estudio ha revelado que según el color de la ropa que nos pongamos simbolizará nuestro estado de ánimo y en algunos casos, como deseariamos estar.

     En otro orden de cosas menos importantes en apariencia, está la decisión de qué ruta seguir al trabajo o dentro del súper con el carrito, sin embargo esas cosas son las más importantes. Quizá no les haya ocurrido a menudo, pero ya me ha pasado alguna que otra vez que en el súper me han esquivado, (¿tan mal caigo?) Pero no quiero enrollarme con la decisión de que suavizante va a dejar mi ropa mejor.

     No hace mucho decidí que dejaría de esconderme tras esta máscara de fotos viejas y textos justificativos y es que lo que quiero hacer es contar lo que siento. (me pregunto en qué cambiará con la etapa anterior). Tome la decisión de dejar de escoger mi vida para vivir la que tengo y es que, por mucho que me duela, siempre tendremos que escoger que camino seguir.

     Yo escogí el de intentar olvidarme de todo esto, de pasar página pero descubrí que las espinas, si bien no se terminan de cicatrizar, quedan asomando y son molestas, pero están ahí y pugnan por salir y decirnos ¡eh que estoy aquí, no me olvides! No voy a hacerlo! eso sería olvidar el pasado y es que ha formado parte de mi, yo he sido parte de él y él ha sido así gracias en parte a mi.

     Quise olvidar cosas que son imposibles de olvidar, cartas y escritos imposibles de borrar, besos y caricias indemnes de frescura en mi cabeza, miradas que sin decir nada lo dicen todo. Me dije que no volvería a cometer los mismos errores, pero el convivir con los ya cometidos implica volver a cometerlos… ergo ¿cual es la decisión acertada?

    Hoy eché de menos… esa sonrisa de labios escondidos, esa mirada de glamour que te envuelve, esa pasión desatada y tantas cosas que me dejo atrás… que he tomado la decisión de no olvidarlas en el camino, porque por mucho que me cueste reconocerlo, en este camino me han puesto a regañadientes, pero soy yo quien toma la decisión de si girar a la derecha ó… ( como diría el tom-tom) su otra derecha!